Aférrate a mí, seremos la balsa nadando contra corriente,
el agua al revés en la caída de la más grande cascada,
tronco y ramas enlazados brotando juntos suspiros de hojas,
aire que vence al aire y lo transforma en brisa de nadie,
la estrella rebelde que fugaz escapa de las demás.
Estela de navío surcando los mares que nadie podría navegar,
nube infinita apagando el sol y sol quemando en fulgor,
del arrecife, el coral, del coral seremos el mismo mar,
lucharemos abrazados contra la más furiosa tempestad,
pues no habrá sobre el universo quien nos pueda separar.
Soy de tí, de mí tu eres, somos el uno en el otro,
somos y seremos más allá de los jardines prohibidos,
más allá siempre de los límites permitidos,
más allá de cualquier razón humana,
más allá, tu y yo, somos...
eternamente inseparables
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